A finales de los años 90 estudié Derecho y era muy (pero que muy) aficionada a la cerveza. De ahí que mis amigos comenzaran a llamarme, cariñosamente, Ally McBeer, como la protagonista de la serie americana de abogados.
Nunca tuve sobrepeso. Tal vez porque era joven y me movía mucho. Además, vivía en un piso de estudiantes que estaba en una sexta planta, y no había ascensor. Y comíamos poco, claro, en parte porque no teníamos dinero (o porque, el que teníamos, preferíamos gastarlo en cerveza) y en parte porque estábamos siempre tan ocupados viviendo que no nos preocupaba sobrevivir. Se daba por hecho. La alimentación era un asunto absolutamente secundario.
Después vino el embarazo y, con él, el sobrepeso. La gente me decía que con la lactancia iba a perder el peso que había ganado. Pero nada de eso. A mi la lactancia me daba un hambre atroz y, claro, comía con ganas.
El caso es que han pasado siete años y el sobrepeso sigue conmigo. La semana pasada le hice un comentario a una vecina que acaba de tener un bebé y ella me preguntó: "Y tú, ¿que esperas? ¿Niño o niña?". "¡Yo nada!" le dije. Y no supe si reír o llorar así que me fui a la farmacia a pesarme y éste fue el resultado:
Así que tomé la decisión de perder, por fin, todo el peso que me sobra. Ésta es la lección que aprendí:
Cuando te preguntan si esperas niño o niña,
es hora de ponerse a dieta.
A mí también me lo preguntaron una vez, ja ja ja. Lo comenté en un post gracioso (gracioso ahora, entonces no me hizo puñetera gracia).
ResponderEliminarhttp://de-patitoacisne.blogspot.com.es/2010/08/dialogo-estupido.html
Unos saludos :-)))
Ya ves, mal de muchos consuelo de tontos, pero me ha hecho gracia leer tu post.
ResponderEliminarLa verdad es que a mi nunca se me ocurriría dar por hecho que alguien está embarazada sólo porque tiene tripa... ufff qué mal trago!!
Yo siempre evito preguntar cuando veo a una mujer con tripita, porque la puedo poner en un compromiso como el que te pusieron a ti : )...aunque me quedo con las ganas de hacerlo, no creas ; )
ResponderEliminarFuerte abrazo, te sigo
Gracias Javi.
ResponderEliminarHaces bien, yo también prefiero quedarme con las dudas antes que meter la pata. Ahora me lo tomo todo con mucha filosofía, pero si me hubiera pasado hace un par de años me habría sentado fatal.
Un abrazo también para ti. Nos leemos.
Cuando me daban el asiento en el colectivo me moría de vergüenza... pero ultimamente hasta los he aceptado!! En fin, es un bajón, pero mas bajón es andar explicando que una es gorda!
ResponderEliminarYa, por eso me dije "hasta aquí hemos llegado", y en ello estoy xD
EliminarQué bárbara Lady, estoy enganchada con el blog, me encanta leerte :D
ResponderEliminarBesos.
Lo mio fue peor... me lo preguntó mi hijo de 5 años!!! jajajajajaja
ResponderEliminarComienzo a seguirte, hace unos días que estoy aprendiendo a comer mejor... con apoyo de dietista-nutricionista ( sóla hago lo que me da la gana, aunque me sepa la teoría)
Un saludo.
Alicia
http://aprendoacomermejor.blogspot.com.es/
A mi me lo pregunta mi madre cada vez que me bajo del avión, con mala leche claro xq sabe que no lo estoy... eso sí un día le voy a dar el susto jajajaja
ResponderEliminarMe encanta que escribas tb del tema embarazo y peso :)
http://marmota30.blogspot.de/